viernes, 10 de abril de 2009

Donde crecen sueños


Hace más de 50 años, una colonia cañera dominaba los alrededores de Guamuta, en cuyo cultivo giraba parte de su vida. Así cuentan los más viejos de esta zona ubicada a 25 kilómetros al sur de Cueto, municipio del Este holguinero. Con el triunfo de la Revolución, en el territorio se potenció la siembra de café y cultivos varios, así como la producción de leche.
En sus inmediaciones, hacia el Norte, se extienden onduladas colinas cubiertas de pasto o vegetación poco densa. Al Este y Sur las montañas predominan sobre el paisaje de verde intenso. Es un contraste hermoso, mucho más cuando las lluvias de primavera acarician el suelo.
Hoy, Guamuta es parte del Plan Turquino y asentamiento principal del Consejo Popular que lleva igual nombre. Allí convergen servicios médicos, sociales, culturales y técnicos con calidad y deseo de trabajar. Historia y naturaleza se respira en el sitio, donde en 1958 estuviera emplazado un campamento del Segundo Frente rebelde y cuyos horcones permanecen asomados en la negra tierra, como símbolo imperecedero de resistencia.
Una población cercana a dos mil personas disfrutan actualmente de las bondades del desarrollo y la vida moderna, como en la mayoría de las ciudades. Un ejemplo es el combinado mixto de servicios técnicos que atiende las necesidades de reparación de equipos de la Revolución Energética.
Aquí, los lugareños también disponen de barbería, taller de calzado, de bicicleta y afilado de machetes. Raciel Vargas, administrador, resalta la motivación de sus siete trabajadores que labora la semana completa menos sábado, día de estudio para casi todos. Hasta febrero el promedio de usuarios del taller se comportaba alrededor de mil 500 personas mensuales, aparte de la atención domiciliaria.
Otro beneficio de reciente incorporación es el cambio de telefonía manual a una tecnología fija alternativa, incorporada tras paso de Ike, aunque no definitiva. El centro telefónico que se inauguró en 1989 para el mundo era una reliquia por su obsoleto sistema y un problema para mantenerla en funcionamiento.
Ahora se hallan en la comunidad 12 de estos modernos equipos de comunicación entre clientes estatales y residenciales. A pesar que existe el límite de minutos, los vecinos comprenden el avance: están en línea con Cuba y el mundo.
En Guamuta también se aprovecha la materia prima abundante en la flora local para la confección de elementos decorativos y de uso personal. Esta es la función del taller de industrias locales, cuya línea de producción elabora artículos en moneda nacional y divisa. De esta forma comercializan desde una escoba de yarey hasta sombreros de guaniquiqui, jabas decoradas y souvenir a base de madera. Algo que ya no realizan por falta de mano de obra especializada, son las maracas naturales pirograbadas, unas de las mejores del país.
El montañés de este paraje goza de consultorio médico, farmacia, centro de estomatología, librería y correo; otros indicadores de bienestar social que no por conocidos siguen siendo importantes. En el orden alimentario, la panadería es la columna vertebral de la confitería en la región garantizando además la merienda escolar.
Carlos Verdecia Rivera es su administrador quien comenta que aún elaboran pan, galletas, kake y otros con un viejo horno de combustión de madera. Tras el paso del ciclón en septiembre pasado, la unidad continuó laborando gracias al grupo electrógeno, equipo que junto a la mezcladora sobadora de procedencia china, hacen posible la entrega diaria de 400 kilogramos de productos.
En el mismo orden gastronómico, la cocina eléctrica instalada en el círculo social, sustituye el fogón de leña, brindándole superior calidad a los almuerzos y comidas en esa instalación comunitaria.
Quien visita el asentamiento en lapsos de tiempo diferentes, se percata que allí la vida crece como sueños posibles. Ya sea algún beneficio colectivo, los frutos de la agricultura o el empeño de gente trabajadora y humilde. Sus logros no son producto de casualidades, sino resultado de la acción conjunta del gobierno y el hombre de la montaña.

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